domingo, 12 de abril de 2015

Yo te maldigo, Disney

Por animar a los mojabragas
a creerse poetas.
Sin tener caballo no se es caballero, 
os lo recuerdo.

Por inculcar a las best friends forever
palabras tan bonitas 
en las redes sociales:
«¡Eres mi hada madrina, tía! 
No sé qué haría sin ti».
Pues vomitar arcoíris, 
como yo ahora.

Por hacer pensar a cualquier chica de barrio
que puede convertirse en princesa
‒eso solo lo consiguen las periodistas guapas‒.

Por inventar la expresión "happy end"
y no cargarla de obscenidad,
¿o sí? 
Y yo sin darme cuenta...

Por haber exterminado
a toda la población de perdices, 
y por haber desalojado todos los palacios
del mundo mundial.

Por todas estas razones
(y, principalmente, por haber destrozado
el fantabuloso cuento de 
La Cenicienta
de los Hermanos Grimm
en tu última adaptación a la gran pantalla),
yo te maldigo, Disney.

domingo, 5 de abril de 2015

Eterno retorno

"Andaluces de Jaén,
aceituneros altivos,
decidme en el alma: ¿quién, 
quién levantó los olivos?"
Miguel Hernández

A mi abuelita Emilia

          I

Un bálsamo de vida
en la mejilla
nos llevamos 
de aquella princesa árabe
que custodia un eminente castillo
(un manojo de piedras bien colocás).

Águilas reales revolotean
en sus neblinosos cabellos.
Sus ojos verde oliva
‒como recién exprimida‒
nos testifican que,
para ella,
somos dos simples desconocidos.
Se dejó la memoria olvidada
en la receta
de los roscos de Pascua. 

Viajamos para huir
de los fantasmas
que ya no saben,
no quieren
o no pueden
abrazar.

          II

Marchamos 
cuando el sol todavía tenía hambre,
sin reloj, 
para que el tiempo no presione;
una banda sonora
de no sé qué película
nos envuelve.

Sesenta y ocho curvas levantamos
de las faldas de la montaña.
Doscientos sesenta y siete kilómetros
en carruaje
por tierra
nos aguardan.

Hemos de acostumbrarnos
de nuevo
al murmullo del mar:
volvemos al punto de partida. 

jueves, 2 de abril de 2015

Señorío de los llanos. En un rincón de Bolnuevo

"...fragmentos
de algo que tuvo sentido en algún sitio,
para alguien."
José María Álvarez

Hallelujah

Para 5inco

Somos frágiles
instantes
(sí, somos tiempo)
concentrados en un lugar,
reunidos en un solo cuerpo;
ni el mismo cristal,
ni tan siquiera el mar
es capaz de superarnos
en sensibilidad.